Tradicionalmente, el área de ciencias es dejado de lado en la educación primaria. Esta iniciativa plantea la enseñanza de nociones de física y química desde el primer grado, de manera divertida y sin la necesidad de contar con un laboratorio especializado. Los niños y niñas luego de pasar por estas experiencias demostraron un mayor nivel de pensamiento analítico, aplicaron el método científico al planteamiento de diversos problemas de su entorno inmediato.